miércoles, 8 de abril de 2015

Crujiente de morcilla sobre patata asada

Una tapa sencilla pero muy llamativa y espectacular.
Nos vamos a basar en las típicas patatas asadas al horno, la receta ya la tenemos en el blog "Patatas asadas con alioli" La reproducimos ahora: Vamos a elegir una patata nueva, mediana tirando a pequeña, que casi nos entre en la boca de un solo bocado. Las lavamos muy bien por fuera para eliminar todo rastro de tierra o suciedad. La cortamos a lo largo por la mitad longitudinal, por la parte más alargada, con una puntilla, cuchillo pequeño afilado, damos unos cortes paralelos en ambos sentidos, sin llegar a traspasar la piel por debajo. Queremos mantener la piel en todo momento, la comeremos sin problemas.
Una vez dados esos cortes, salpimentamos y añadimos unas gotas de aceite de oliva virgen extra entre esos cortes, colocamos en una llanda de horno, una fuente de cristal para horno, y las mantendremos en el horno precalentado a 180º durante 40 minutos más o menos hasta que las veamos por encima doradas, tostadas, pero no quemadas.
Para el crujiente de morcilla, vamos a tener seis morcillas de cebolla, la típica en media España, aunque puede valer cualquiera, incluso la de arroz de Burgos. Vamos a quitar la piel y la masa la vamos a extender en un papel de hornear, estirándola lo más que podamos sin romperla. Colocaremos un papel más por encima, pondremos todo en una llanda al horno a 50º durante una hora, tenemos que dejar la masa de la cebolla deshidratada y crujiente y para eso no es necesario altas temperaturas, sino tiempo.

La presentación, un par de cascos de patata y el crujiente por encima, adornamos el plato con un pimentón o unas hojas de perejil fresco. 

miércoles, 1 de abril de 2015

Zarangollo de calabaza (Ciezano)



Plato muy típico de Cieza (Murcia), y más en las fiestas de primavera.
Vamos con la receta, que consta de cuatro ingredientes básicos, el huevo, Calabaza Cucurbita y particularmente en una calabaza de invierno, la calabaza butternut, la ñora (pimiento seco), la patata y la cebolla
 
El resto, aceite de oliva, AOVE, sal, y mucho cariño.
Cantidades, pues para dos personas, dos patatas medianas, 200 gramos de calabaza, una cebolla grande dulce, cuatro huevos de codorniz o dos de gallina, dos cucharadas de AOVE, y una pizca de sal y otra de azúcar.
Yo esta receta la preparo como si fuera para hacer una tortilla de patatas. Es decir, en una sartén cada una de los tres ingredientes que hay que cocinar.
Para ello, vamos con la calabaza, la limpiamos de la piel con un buen cuchillo afilado, la piel es muy dura. Troceamos lo mas pequeño que nos permita nuestra habilidad y cocinamos en una sartén con menos de una cucharada de AOVE, a fuego muy flojo, añadimos unas pizca de sal y otra de azúcar. La calabaza suelta menos agua que el calabacín, por lo que el tiempo será de una media hora.
Seguimos con la cebolla, a la que pocharemos en una sartén a parte, cortándola en juliana y al igual que la calabaza, a fuego muy flojo y la misma cantidad de AOVE, la terminaremos en media hora. En ese momento añadimos las ñoras limpia, troceadas y sin pepitas, rehogamos un par de minutos, reservamos unos trozos de ñora para decorar al final.
Y las patatas, peladas y cortadas en rodajas como para la tortilla de siempre, cocinamos como siempre, a fuego medio y con una pizca de sal.
Cuando tengamos las patatas cocinadas y las cebollas las juntamos en la misma sartén para que los sabores se unifiquen. Cocinamos por cinco minutos, rectificamos de sal.
Es el momento de los huevos, los freímos en una sartén, sin AOVE si son de cordorniz, si son de gallina, pues como siempre con el aceite muy caliente para que la clara se cuaje en puntilla y la yema quede líquida.
Presentamos en unas rebanadas de pan ligeramente tostado, y adornamos con unos bastones de calabaza, los trozos de ñora por encima y los
Plato que se puede comer frio, templado o recién hecho. Como tapa excepcional. Su sabor saldo y dulce a la vez contrasta con el tono de la ñora.
Una exquisitez.
A mi amiga Matilde